Ya se ha podido apreciar una parte de la multitud de elementos que componen un billete. Aquí nos centraremos en reconocer los elementos gráficos que incluyen y su importancia, especialmente en aquellos que aportan información más relevante en la lectura del billete como imagen comunicadora de un mensaje de identidad nacional. A partir de la observación podemos diferenciar entre signos, estos son letras y números; elementos figurativos como son retratos y paisajes, y elementos abstractos, entre los que se encuentran los fondos lineales.

signos

denominación y número de serie

A la funcionalidad del billete el más importante e imprescindible es la denominación o el numeral, sin este elemento sería imposible adjudicarle al billete un valor económico preciso. La denominación siempre estará presente por medio de un número, pero también puede encontrarse en letras al anverso y/o reverso del billete, haciendo conjuntamente alusión a la unidad monetaria que le corresponde (veinte mil guaraníes, cinco pesos, etc.). Otro elemento compuesto por cifras es el número de serie, numeración o folio, unasucesión de números, diferente en cada billete pero correlativos entre sí, que permite el control de las emisiones, junto a una letra que determina a qué serie corresponde; en algunos casos, se especifica aparte el año de producción de dicha serie.

leyendas y firmas

Encontramos también algunas leyendas, en mayor o menor tamaño, de ellas la más importante es siempre la autoridad emisora, pudiéndose encontrar además algunas referencias a la validez del billete como objeto con fuerza cancelatoria y curso legal, leyendas comunes en los primeros billetes que también incluían mención al delito de falsificación. En la actualidad es más normal encontrar otro tipo de leyendas, aquellas que refieren a discursos ideológicos de la nación, como la frase “en unión y libertad” en los billetes argentinos o “Deus seja louvado” en los brasileros. La leyenda más pequeña indica cuál ha sido la casa impresora, ubicándose cerca de algún borde, en el anverso o en reverso. Finalmente podemos incluir en esta categoría de signos a las firmas de determinadas autoridades que imprimen una legalidad definitiva al billete.

resellos

Un elemento no cotidiano pero frecuente en los momentos que se cambia de unidad monetaria es el sello. Estos sellos, que contienen los datos de denominación de la nueva moneda, permiten la circulación simultánea de viejos y nuevos billetes, hasta tanto los usuarios se adaptan al cambio y paralelamente se produce una cantidad de moneda suficiente como para permitir el retiro de circulación de los viejos billetes, reemplazándolos.

Los billetes resellados se han visto más de una vez en Sudamérica, con inscripciones que determinan el nuevo nombre y/o valor del billete.

 


motivos abstractos

(y no tanto)

Podemos encontrar variedad de motivos abstractos en los billetes, conformando figuras aisladas, guardas o retículas. Palabras empleadas para denominar algunos de estos elementos son roseta,ornato, guilloches y fondos de seguridad.

En el apartado anterior hablamos sobre los guilloches y fondos de seguridad. Ya sabemos que los fondos pueden estar constituidos por varios elementos, y que vistos con detenimiento pueden observarse en ellos números, letras, formas geométricas o formas figurativas, siempre más ocultas que visibles, pero que además de dificultar la copia fraudulenta, pueden complementar las imágenes y adornar el billete. Las rosetas o rosetones son figuras geométricas redondas, romboidales, triangulares, o de varias otras formas, incluso asimétricas, generalmente formadas por guilloches, que se incluyen para contener números, letras, siglas, o simplemente como adorno.1 El ornato, como su nombre indica, es una figura para adornar o realzar. 

 

Se puede concluir que todos estos elementos tienen el fin de adornar y dificultar la falsificación, siendo sus estilos variados, pero siempre más complejos que sencillos.

Roseta simétrica y asimétrica compuestas por guilloches, a las que se le superponen la denominación.

 

 

Roseta junto a un retrato, en un billete del primer diseño de Pesos Convertibles argentinos.

 

También pueden pasar por motivos abstractos para quien no está informado sobre el tema, las pequeñas figuras geométricas, con relieve, que han sido incorporadas2 especialmente para ser percibidas por medio del tacto. Estas marcas para invidentes son un avance en la inclusión de las minorías.

 

 

Imágenes figurativas

En los billetes, son las imágenes figurativas las que nos transmiten más claramente el discurso del grupo dirigente, que se irá convirtiendo en parte de la identidad nacional. La imagen del billete con retrato se ha instaurado como arquetipo, y por otro lado una generación joven que creció acompañada de dibujos norteamericanos, cuando recurre a una imagen inmediata de dinero, lo asocia al color verde. Sin embargo, sabemos que los billetes no son sólo verdes y que no debieran serlo tampoco, y sus imágenes predominantes no son sólo retratos.

Se han utilizado múltiples palabras para referirse a las imágenes figurativas de los billetes:3 retrato, efigie o prócer cuando remiten a una persona; viñeta, motivo o grabado, cuando se trata de imágenes generalmente en el reverso o en un segundo nivel de lectura, aunque se denomina mayormente viñeta a aquellas que están enmarcadas. 

¿Donde quedan clasificadas entonces, las puertas de los euros, o los animales protagonistas en el reverso de los billetes brasileros que circulan desde 1994? No es nuestro propósito proponer una clasificación, pero hablar de figuras o imágenes principales y secundarias sería más pertinente que manejar un basto léxico que encasille el contenido de estas imágenes. Es así entonces que podemos encontrar efigies (sean la personificación de algún valor o ideal, o la representación de personas reales), paisajes naturales o urbanos, animales, flores, obras de arte o arquitectónicas, momentos cotidianos o históricos, realidades o ficciones, pudiendo estar como protagonistas. En la actualidad, una característica de las imágenes principales, es que llevan una leyenda que relata lo representado; este texto aparece acompañando o complementando a la imagen principal, al igual que las imágenes secundarias, aunque estas pueden fusionarse con el fondo.

 

 

 

Ejemplo de complemento

En un billete de 5 pesos argentinos podemos apreciar como el retrato del Gral. San Martin se complementa con la imagen del Abrazo de Maipú, hecho histórico y simbólico de la unión entre Chile y Argentina, parte de la independencia chilena, haciendo evidente en el discurso del billete la participación de San Martín en la liberación de países sudamericanos.

Ejemplo de fusión figura-fondo

en el reverso del billete de $50 de Argentina tenemos el ejemplo  imágenes que se fusionan con el fondo.

 

 

Símbolos

La presencia de escudos o sellos se arrastra desde las monedas. Sellos reales en sus inicios y escudos nacionales que forman parte de los símbolos patrios en la actualidad. Los escudos suelen presentarse aquí en su versión a pluma, pudiendo ocupar una superficie pequeña o mediana, pero es indudable que encierran cantidad de significados, en un juego de simbolismos que por lo general sigue las leyes de la heráldica. Puede presentarse en lugar del escudo una bandera, como en el caso del euro.

La presencia de este elemento se considera una forma de legitimar a simple vista la validez y legalidad del billete, por medio de un símbolo fácilmente reconocible por la población nacional, y evidenciarlo como uno de los medios o herramientas del discurso identitario.

Breve recopilación de escudos nacionales en billetes 5000 pesos de Colombia

imágenes ocultas

Las imágenes ocultas a simple vista, como la marca de agua y la imagen latente, suelen ser importantes en el mensaje del billete, a diferencia de las contenidas en los fondos de seguridad o líneas compuestas por microtexto. 
Podemos tomar como un claro ejemplo el caso del billete de 2000 pesos de colombia que circulan en la actualidad, cuya marca de agua, independientemente de la personalidad retratada en el billete, era la efigie de la Artista Débora Arango,  imágenes latentes. Se le presenta así como un ser prácticamente omnipresente, imposible de olvidar en la identidad e historia de Colombia.

 

 

Aspectos gráficos y de representación

Concluido el apartado anterior, ya tenemos en mente cuáles son los elementos que componen al billete.

Pasaremos ahora a analizar diversas cuestiones en torno a su aspecto.

 

características de las imágenes

Las imágenes presentes en los billetes, están realizadas con un ángulo de visión normal, y tienen características del naturalismo, proporcionando la idea de objetividad e imparcialidad, donde no se nota la presencia de un observador o intervenciones que añadan segundos significados, se asemejan más que nada a los dibujos de un diccionario ilustrado. Pocos son los casos mundiales en los que se utilizan imágenes caricaturescas, entre ellos se encuentran los retratos de la serie diseñada por Ootje Oxenaar a fines de la década de 1960 del que ya vimos uno con anterioridad.4
Por lo general, el estilo remite a grabados antiguos, y por más que el grabado a buril es las técnica más empleada para la creación de billetes, necesaria para la impresión calcográfica, una técnica no tiene por qué estar sujeta a un estilo de representación. En el pasado y en el presente se han empleado otras técnicas que confieren un estilo diferente a las imágenes, como fue la fotomecánica, medio por el cual se obtenían imágenes a medios tonos variando el diámetro de una retícula de puntos o el espesor de líneas, siendo las partes de mayor diámetro o espesor, las regiones más oscuras.


Fotomecánica

De arriba a abajo y de izquierda a derecha:. Imagen compuesta por líneas y puntos, características del grabado a buril. hecho por fotomecánica. Detalles de un billete de 50 shéquels de Israel (2007), que usa una variación del principio de la fotomecánica.

El marco: resaltador del valor

Por mucho tiempo se estiló el uso de los retratos con marcos, otorgando a dicha imagen una fuerte característica de cuadro. Una imagen enmarcada logra una mayor jerarquía que una sin enmarcar. Pensemos en las fotografías, aquellas que están enmarcadas es porque han llegado al punto de convertirse en un objeto valorado; lo mismo sucede con las pinturas y los dibujos. Las razones pueden ser varias, pero en el caso del billete es una forma de resaltar el valor de dicha figura, especialmente durante un período en que son figuras de una historia aún muy joven y reciente. No hay que olvidar que el recurso del marco también fue empleado para ilustraciones al dorso de los billetes, es lo que algunos llaman viñeta, y resulta también una forma de brindarle otro estatus a los paisajes nacionales, el de patrimonio.

EJEMPLO: Billete notgeld de Danzig 50000 Marcos.

 

 

Hay billetes más grandes y billetes más chicos, y hay una pregunta bastante común que nos puede hacer un cajero al momento de pagar: –“¿tiene más Pequeño?”–. Asociamos valores menores a tamaños mayores.  Circulan en Colombia la nueva familia de billetes, estos billetes aumentan su tamaño a medida que aumenta una mayor denominación, de la misma forma que lo hace hoy el Euro. 

 

 

la orientación en la composición

En una superficie rectangular, tradicionalmente hay dos orientaciones posibles: la horizontal y la vertical. Cada una de ellas tiene connotaciones diferentes. Un objeto en horizontal remite a lo pasivo, estático, mientras que estando en vertical nos remite a lo activo, dinámico. Son el yin y el yang, y de la misma forma, ambas orientaciones pueden complementarse y estar presentes en un mismo objeto. Mientras lo horizontal alude al equilibrio y estabilidad, lo vertical nos remite a la fortaleza. 
A pesar de poder utilizarse cualquiera de las dos disposiciones, estamos más acostumbrados a la horizontal. La orientación horizontal es la del paisaje, la vertical la del retrato, esta es una regla tradicional de la composición, y es llamativo cómo se la ha obviado en los billetes, incluso en los actuales billetes de países como Japón, cuya escritura se adecua perfectamente al formato vertical. Es comprensible que al inicio se prefiriera una disposición horizontal, para contener múltiples frases e imágenes, pero con el tiempo se le ha dado un mayor predominio a los retratos de antaño, sin cambiar la orientación.
Hoy en día se puede asegurar que una disposición vertical cumple mejor los requerimientos de manipulación, entregamos el dinero en disposición vertical, lo introducimos en los cajeros y máquinas de la misma forma.

 

 

Estilos y expectativas Clásicas

Volviendo a las imágenes arquetípicas, esta vez no de contenido, sino de aspecto, diremos que se suele relacionar todo elemento importante que forme parte del poder e imaginario nacional, con estilos hoy antiguos y clásicos.

Los estilos que priman en los diseños de billetes, son los estilos clásicos, obedeciendo a esos arquetipos de poder, seguridad y estabilidad. 
Recordemos las casas o palacios de gobierno, recordemos los billetes de fines del siglo XIX y la primera mitad del XX, visualizamos entonces figuras neoclásicas y barrocas. 
El lujo es poder y el poder busca legitimarse, esta es una idea que se arrastra desde hace siglos, las monarquías la toman de la iglesia. Aquí en Sudamérica, durante las épocas de la independencia, las nuevas clases dominantes, a pesar de ser libres del dominio político europeo, ven en el viejo continente un ejemplo a seguir en múltiples aspectos, entre ellos el artístico y copian las estéticas clásicas como herramienta para legitimar su poder y autoridad durante la creación del nuevo Estado.

Después de haber expuesto este contexto, podemos comprender que en muchos casos el empleo de un estilo clásico en los dibujos realizados en grabado a buril, responden a este arquetipo, un arquetipo que se convierte en expectativa, se espera ver eso en un billete.